Futuro Imperfecto

Argentina…

… Después de la ley de Medios.

Situaciones caóticas que pasarían-pasarán-pasaron-debieron haber pasado en el país, (conjuguen a placer) según la óptica de muchos comunicadores, una vez sancionada la nueva ley de servicios audiovisuales, La ley de Medios K, para muchos.

Bronca concheta: miles de mujeres paquetas se dejan de rascar el culo y organizar reuniones solidarias, para comenzar a quejarse sobre la nueva programación. Les resulta inadmisible que aparezcan negros e indígenas en la tele. “Cómo –dicen- yo apadrino negros de Haití, no me vengan con Bolivianitos”.

Ola de plagios Nac&Pop: todo lo recibido y transmitido en los últimos años sufre una resignificación hacia lo patriótico o bien lo popular: la música, el cine, el deporte, los reality shows… Todo.

Se va Mirtha: La CGT obtiene una licencia y emite un programa diario a las 13 Hs, la idea no tan original es reemplazar los clásicos almuerzos de Legrand. El programa se llama “Comiendo con la Gladys” y en él se reciben diferentes invitados de la UOCRA, SUTEBA, UPCN y otros gremios que, damajuana mediante, se clavan sándwiches de mortadela, guisos de mondongo y bifes de Hígado. El programa dura dos horas, a puro pedo, eructo, charlas de putas, travestis y los partidos del domingo, todo ante la atenta mirada de Gladys que pelea arduamente con los escarbadientes. Finaliza la tira diaria con el himno y una ofrenda floral a Perón. En los cortes, lejos del “carajo Mierda”, se habla de maniobras desestabilizantes, puja de poderes, rebote de paritarias y poder, plata, poder. Eventualmente es invitada Beatriz Sarlo, a quien le tiran con servilletas de papel y, dicen, el ex Susano Vladimir –repatriado para la tarea de mozo- le escupe el morfi entre la cocina y la mesa.

Chau Monopolio: Clarín cierra Volver y ésto abre la puerta a que varios programas emitidos en dicha señal sean reformulados. La banda del Golden rocket cede su lugar a “El grupo del súper Europa” que narra las peripecias de unos empleados portuarios que se empoman entre ellos y toman merca en los asientos traseros de un Fiat 128 tunneado. El programa es levantado y reemplazado por “Grandecitas” una tira diaria a la hora de la merienda, ambientada en un hogar llamado “El rinconcito de Néstor” donde las internas adolescentes, llamativamente, están muy avanzadas en los conocimientos de Jauretche, Cámpora, Perón, López Rega y demás actores históricos sujetos a la condena o la reivindicación . El programa influye de sobremanera en los jóvenes que la miran: los niños de séptimo ya no juegan al verdad consecuencia durante el recreo, por el contrario, mantienen encarnizadas tertulias defendiendo el proteccionismo o motivando el libre comercio.

Desaparece TN –obvio-: a raíz de ello el Bebe Contemponi se retira de las cámaras y se va a mandibulear por ahí, junto a Joaquín Levinton. La tota Santillán se hace cargo de la Viola y mantiene el formato, sólo que el programa pasa a llamarse “el teclado” y la tota cubre los recitales del Indio Solari y del Polaco, todo con la misma naturalidad. Los de TN tecno, desocupados y con el programa levantado, dejan de lado tanta histeria y miraditas cómplices para matarse a puro sexo, no importará el Second Life o Mario Bros, sólo ellos. Sergio Lapegüe se deja de hablar boludeces a la medianoche y se digna a trabajar estibando cajas en una fábrica de galletitas. Además del bueno de Sergio, todos aquellos que se han pasado los últimos años tirando mierda en el canal deben trabajar también, pues la mentira se terminó y las amas de casa, junto con los taxistas, se dan cuenta de que estos periodistas dicen lo mismo que ellos, con la diferencia de a que los últimos que les pagan. Los ciudadanos, hartos del ida y vuelta implícito, de escuchar malas noticias por el ansia de escuchar malas noticias, cambian de canal.

Argentoons: validando el temor de un diputado opositor, el pato Donald efectivamente es eliminado del imaginario nacional, reemplazado por emisiones de dibujos nacionales: Los pintines, los peques, Hijitus, patoruzito, Condor Crux y tantos otros. Uno de los peques luce una remera en la cual se lee “Donald se la come, larguirucho se la da”. Los cuentos de Andersen y las tiras de Disney ya no son lo que fueron. El ruiseñor Mecánico deja su hermosura al “Zorzal de Techint” un maravilloso pájaro que canta tangos con la voz de Gardel y entona el himno en formato Midi. Blancanieves se esfuma en el pasado, en su lugar surge “Blancayceleste y los siete autóctonos” una parodia cuyo argumento consiste en una mujer adinerada que se pierde en un bosque Patagónico. Allí, siete gnomos la ayudan y le inculcan su tradición y sus valores. Cada gnomo representa a un pueblo originario de esta tierra. Los niños conocen a "Menem Mouse" un ratoncito con muchos pelos blancos en la oreja, acento particular y una singular habilidad para romperle el culo a más de 30 millones de argentinos que, no contentos con la vejación, le piden que vuelva.

La ola estatizadora y popular alcanza los canales para adultos. Venus mantiene su formato, sólo que pasa a llamarse "A coger que se viene el gorilaje". Sus contenidos cambian sustancialmente. Las películas son íntegramente de producción nacional, los actores son elegidos a dedo por carlitos perciavalle y las mujeres son trabajadoras sexuales regenteadas, con empleo en blanco y libertad de acción. Esta modificación cambia para siempre el lenguaje de los Púberes venideros: Del noventoso “oh yeah.. ohh, God... Yeah… Fuck” se pasa al “Sí… Rulo, sí, dale nomá”.

Y bueno, no puedo dejar de lado ésto, fresquito: http://www.clarin.com/opinion/ley-medios-causa-estragos-interior_0_487751307.html aunque pienso lo mismo: qué difícil es juzgar a un órgano que gobierna a millones partiendo de un caso particular. Cada uno de nosotros elige.